VER LA VIDA

una noche se hizo noche
no como yo esperaba
sin el regado del romanticismo
con la luz vaporosa siempre negada
sin el rocio de los besos tercos
con el alma abroquelada
quizás no te conocía
no conocía la alborada
es que de tanto andar a oscuras
o negro se vuelve claro
el caos se hace equilibrio
el huracán una brisa suave
hay que andar la vida de espaldas
para entender como se viaja
a contramano,
con el pulso detenido
con los latidos quedo del corazón
y el alma deshabitada.

Saber que nadie regala nada
todo se adquiere a pleno destajo
no vienen las primaveras por obsequio
ni las flores se abren agraciadas
no son los gorjeos de las aves
derechos sin prestaciones
no, al menos a un cegato
ese que niega lo innegable
al lento optimista de la muerte
el que esta impedido desde hace rato
a considerar los días como presente
al sacerdote de lo despreciable.

Solo se que tuve que superar mi noche
hundido en las aguas de mí esperanza
sumergido en la vivencia de este momento
ni mejor ni peor, solo el que alcanza
a ubicarme en el camino de aquellos vientos
los de la gracia agradecida
la de unas manos que se estiraban
para cruzar por la debida
senda temprana de colores nuevos
de prisiones ya vencidas
de alcázares que imponentes
sobrecogían mi valentía
influían a perseguirte con tu anuencia
hasta que en un instante de ese dia
pude alcanzar tu tranco andariego
que asi es la vida
trajinar aquí y ahora
con la evidencia de ampliar la vista
y con tus ojos ver que fluyo sin estar ciego