miércoles, 7 de enero de 2009

LA FALSEDAD DEL MAÑANA




El mañana es una falsa promesa
De ayeres resentidos y olvidados
De horas quemadas en las hogueras
Muertas como rosas en el pasado
Escrituras en un papiro apócrifo
Arrojado en una obscena redoma
Prometiendo desconocidos paraísos
Encontrados tras los puntos y las comas.

El mañana es un ahora adulterado
Que en la narración de esta historia
Te contara de Mesalina o Magdalena
Regodeada en la escasez de tu memoria
El hoy esta lleno de tu vida y de tu muerte
Esta pintando con colores el presente
Borroneando todo vestigio en disolvente
De tal forma que consultes a un oráculo con suerte.

El mañana es la mentira retrasada
La marejada de tu sexo arrepentido
La credulidad de perpetuar este instante
Cuando el espejo te devuelve sin sentido
El endurecimiento efímero de tu promesa
Conocerá la docilidad de tu reciedumbre
Que no pasara de la línea de este otoño
Cuando tu florecido árbol predilecto
Pierda una a una sus hojas y no conozca los retoños.

El mañana es la suma de lo postergado
De aquellos asuntos que serán inalcanzables
Pero no todo esta utopía es ilusoria
En el presente hay grandes cosas realizables
Desde las luces magas de una alborada,
Tu vista de desnuda mujer descontrolada,
El cantar de los pájaros en lo oculto de tu albergue,
Alguna tarde que repentinamente se ha aclarado

Para este tiempo hay compensación
Cuando tropiezas ante ella que se desviste
En la evocación de tu tórrido paraíso
Desconociendo el devenir de sus miradas
Acobardada de no saber designar lo que no existe
Porque no encuentra palabra
Para llamar al todo por la nada.

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