ODIO

El odio aquel
Proveniente de algún feudo cercano
Abrió la puerta entornada
Y se arrojo feroz sobre la mano
Con un festival de antorchas resentidas
Cruel,
Endemoniado
Con la razón ultima perdida.

Odio evocado como un Facundo
Escuchó ese débil latido tan cansado
Ahora, que ella parte sombría de este mundo
En la tristeza tan miserable has ganado
El amor quedo resignado al olvido
El afecto es la ruina de un paraíso hundido
Donde el cariño es un recuerdo del pasado

Odio arrebataste con derecho
Lo que en tu camino se interpuso
Te desataron de tu oscura marejada
Pretendiendo de ti la soez indulgencia
Sentimiento innoble pero no difuso
Descontrolado asesino de madrugadas
No te entendieron no supieron de tu esencia
Construido dia a dia desde el desprecio
Desde la mirada torvamente marginante
Que te utilizo creyendo saber tu precio.

Odio
No conocian tu particular naturaleza
Te creian bestia habitante de otra llanura
Sin darse cuenta que desde el mismo inicio
Estuviste formando parte de todos en su hondura
Que reclamar tu siniestra aparición
Fue desbarrancarse por su propio precipicio.

Odio evocado como un Facundo
Escuchó ese débil latido tan cansado
Ahora, que ella parte sombría de este mundo
En la tristeza tan miserable has ganado
El amor quedo resignado al olvido
El afecto es la ruina de un paraíso hundido
Donde el cariño es un recuerdo del pasado

EL ROSTRO EN EL ESPEJO

La palabra es un pájaro
Que solo puede ser igual a su vacío
Puedo decirte alondra mía
Que me sobran los brazos
De este sol atormentado
Para contar las sinrazones
Por la que estar enamorado.
Puedo mirar con la mirada del poeta
Y mi ceguera es tan brillante
Que con verte alucine en un instante

Delante del ventanal hay una cara
Que mira a otro rostro en el espejo
Es la sombra de un loco desvarío
Que te piensa cerca desde tan lejos.
Se de noches tormentosas
En soledades compartidas
En uniones apasionadas
Sin junturas
Se de tardes en que se abren las heridas

Entre tanto mar y tanta sal aguada
Descubrí que en tu gélido desierto
Tras tu gemido tormentoso tan despierto
No hizo tiempo de ingresar la madrugada
Tal vez una deidad de un parnaso erótico
Perpetuo en el espejo tu eterna llamarada

LUNA, LUNA

Un tiempo inversamente detenido
Un susurro que nunca ha nacido
Una gota que solo parece aguacero
Un cristal opaco refleja al primero
De los bordes que ocupa el misterio
Los otro han huido a campo abierto
Perseguidos por este cementerio
De ilusiones, deseos, esperanzas
Aquí es donde la pasión descansa
La fatiga última de un joven artesano
Pretendiente de la sangre, carne y alma
De la luna en ese lánguido verano.

La luna no entrega su entera desnudez
Sino en los pliegos de su andar gitano
Es furia pura, es viento huracanado
Es la que cuando ama no da tregua
Es torbellino de sexo desbocado
Arranca entrañas
Brota el sudor acongojado
No la detienen las ramas viejas
Baja y sube
Empieza y termina
Hasta recomenzar tanto como quiera
Esa luna, cuando llena,
Es la luna que ilumina.

Más no es luna de cualquiera
Equivocado el joven anhelante
Aspiro a tenerla como fuera
Pago cara su ambición desmesurada
Esta luna que ha sabido voluptuosa
Convertirse en mar
En fuego, en extensa llamarada
En marejada de sabanas irrespetuosas
En brisa ardiente encaramada
Le negó la luz apasionada
Por un amor taurino en la lluvia de las rosas.

La luna esta creciendo en el derroche
Su torero la posee en lo claro de la noche.

PIBA, LA CURDA...

Piba,
Sabes que hay detrás
De las piruetas del alcohol?
Una vida aguantada inconsolablemente
Un otario perdido en la neblina
De aquella infancia agrietada en la sangria
Con el dolor desfilando en su retina
Hay, no habiendo, progenitores
Hay amigos que emigraron sin retorno
Hay tanta desgracia acongojada
Como también, de la parca el contorno

Piba,
La vida es sin nada más
O morís andando siempre por la sombra
Temiendo a algún gil que mal te nombra
O vivís sacando chapa arrabalera
Primereando a la muerte traicionera.

Piba,
Aprendí que en estas calles no se ruega
Los amores se los talla en la hoguera
De algún infierno metido en la botella
Así me hice guapo para que nadie me ofendiera

Piba, finalmente
Si me ves a mí, al de ayer, en un potrero
Veras la cara de un chiquilín atravesado
Compréndelo, la suerte le vino esquiva
No te hará daño, solo vive agazapado

Piba, cuando veas a un pobre curda
Detrás hay un camino mal andado
Por las cosas que parecen tan absurdas
Que el alcohol tan solo ha anestesiado.

DESEO

Detrás de donde la tierra arrasa
Una encabritada hembra fulgura
Desde lo hondo de la especie amasa
Cada grito de reproche con dulzura
Cabellera de viso verde esperanzado
Con las caderas marcando su figura
En las lomas de mis manos blanquecinas
El olor de primaveras encontradas
En la piel aturdida del clavel aletargado
En tus dos torrentes se empecina
A erigirse el destino falible del pecado

Asoma el alba que trae desvastados
Los naranjos de tus senos admirados
Levanta el vuelo un pájaro impaciente
Que ha despertado pretendiéndose inocente
Mientras las aguas de la noche engarzada
Mojan las sabanas de la pasión cansada

Afuera llueve el sol de la mañana
Con sus rayos pariendo luminarias
Racimos de jilgueros encantados
Como una diosa recibes la plegaria
Con la frescura que animo tú calma
Te entregas ardiente beso a beso
Capturando para siempre al poseso
Ahora, tan solo hay uno en dos.

LA VIGILIA

En un otoño gris
Con un cielo opacado por tu ausencia
Se encamina mi mirada errante
A depositarse en el grabado difuso
De la suma de evocaciones en un instante.

En una tarde asi
El cielo existía atrapado en un charco
Mis ilusiones de verte regresando
Tomando el difícil atajo del mañana
Se desvanecieron en el silencio parco
De un nido de abrazos escarpando
Nuestros cuerpos desnudos ofuscados
Porque todo presente se tiñe de pasados

En una noche como esta
Soñé o creí estar soñando
Que el gladiolo florecido entre tus piernas
Fue regado con la lluvia de mi furia
Que esa entrega pura me pareció eterna
Creyendo que la luna siempre es luna
Sin oír el estridente silencio de ese lapso
Que me indicaba la afluencia del colapso

Ahora, que es otro ahora
Veo frente a mí tu silueta recortada
Me interrogo al paso de las horas
Será el mismo sueño o la pesadilla
De sentir que en el capricho eres la nada

Camino en soledad que es mi único viajar
No se si marcho o si estoy suspendido
Se me hace oscura la mitad de mi pasaje
La otra mitad no es luminoso recorrido
Y la vigilia solo un sueño florecido.

LA DISTANCIA

La distancia
Un lugar donde mi nave no anclará
Un punto al que mi mirada no registrará
Un delirio de oasis en el que morirá
La espuma de mis mares de un día
Sin la esperanza de vegetar en tus colinas
Pero la distancia, me pregunto
Es irreal si te llevo en mi retina?

El deseo
Como un volcán de lava cristalina
Como el furor violento sublevado
De salir a encontrarte en el pecado
Donde quedaste expuesta y abatida
Tras las largas noches de lluvias coloridas
En el que los pétalos de tus labios amplios
Me deshojan beso a beso el deseo
Llenando mi soledad arremetida
Con las bellos pájaros de tus ojos verdes
En mi cuerpo cual vestal en mi herida.

No había distancia
La construyo la soez mentira
Mi imaginación prepara su partida
Llega a tu lecho en la plenitud del ansia

El poeta
Moja la lluvia de tus arroyos enardecidos
Regados en los versos de su poesía
Desgarrada la campiña de lo nocturno
Rezas a parroquias sin feligresía
Los versos escritos en tu espalda
Con elementos vocales de alegría
Con la ausencia repleta de mi esencia
Hundida, perdida en tu cuerpo
Que no requiere de otra forma mi presencia.

La distancia es falsa
El poeta fatigado y esperanzado vuela
El deseo transparente lo consuela
Nunca llego siempre estuvo en ella

a MI NEGRITA

AHORA LA POESIA

Ahora la puerta esta abierta
No hay rodeo, no hay torero
No hay coliseo, ni circo romano
Solo el fruto de la mano
Sin que medie autoridad autoritaria
Son los versos, los poemas
Aquellos que me designaron paria
Son las mismas poesías del embrujo
Que no es lo mismo ser libres
Escribir con el sol de frente sin tapujos
Sin la histeria de un poder amortajado
Con la imaginación pensado lo olvidado
Con el albedrío de optar por ser más brujos
Hechiceros del alfabeto casi crudo
Abonando el silencio desgarrado
Completando de vació lo sagrado
Fue y es el mar, el fuego, el viento
Los dueños volcados y vaciados
En la matriz de unas diabólicas rimas
Que nos moja nuevamente en la cima
Sacudiendo la alfombra de tu cuarto
Para mostrarte cuanto dura el espanto
Eterna en tu esencia de hembra despierta
Miras sonriente las sombras que ayer
A una hoguera te condenaron abierta
Sabes que sin el dedo acusador
No podrán usar los otros cuatros
Un poema es como un azul retrato
Se escribe suavemente poniéndole el alma
O se vive temeroso de perder pronto la calma.

ESTA NOCHE

Suena la alarma de la luna
Esta noche ella no ha venido
Esta noche las flores han caído
En un sueño donde falla la fortuna

Esta noche no es igual a otra
Es la última que dará su luz enamorada
Habrá otras, muchas noches
En la que la luna ha de estar muy apagada

Esta noche se va lo que aun queda
De ese hombre decidido a ser amante
Es una vela que se extingue derrotada
Sobre las sabanas enfriadas al instante

Esta noche el ha muerto desangrado
Es veneno lo que anda por sus venas
Cada conquista de mujer apasionada
Será revancha que mitigue esta pena

No hay consuelo que lo apacigüe hoy
Solo afirma que la noche esta sin luna
Piensa que nunca más será un siempre
Aunque mañana otra vez meza la cuna

NOCHE APASIONADA

Manchas, borrones, maculas
Surgen en las paredes de la casa
Afuera el viento sudeste que confunde
Adentro el calor ardiente que no pasa
En el piso la vestimenta diseminada
Cuerpo desnudo, terso, que se hunde
En otro símil de piel, poros, de su amada
En la pared blanca que ha captado
El movimiento rítmico de las sombras
Donde en negro se refleja agitado
Los gritos del deseo que lo nombra.

Las sombras nocturnas de este dia
Se deshilachan como la saliva de tu boca
Si tu lengua fervorosa me recorre palmo a palmo
Serán los poros de mi cuerpo que te toca
Las lagunas de tus cavidades más austeras
Me entregan el rocio fresco de una roca
Pasión que emerge de la nada que asuelas.

Sientes? Los ruidos briosos del corcel
Que cabalga en tu campiña visionaria
Que ingresa tantas veces hasta el fondo
De la estrecha abertura pasionaria
Donde recogidas están las dos ramas
Que se extienden en los hombros del amante
Que proyecta el vaivén furioso en una cama
Cuando la enorme luna envuelta descubierta
Entre sabanas de raso de un color terracota
Con la almohada baja la cintura tan desierta
Que grita volviendo de oro todo lo que toca

Ahora viene el último descanso tras el acoso
En forma de pantera ennegrecida sudorosa
En el continente pintado del color del sexo
Donde solo regué cada pétalo de una rosa
A pedido de los dioses que en su plexo
Claman por la voluptuosa venganza
Que mañana ha de cumplirse en una nueva danza.

LA NOCHE NEGRA

Los ojos ya no miran
La tierra esta reseca por el odio
La patricia dama pena en su sequía
Las víboras reptan en la vergonzante censura
Se ha ganado un docto mariachi que no quería
El alma desierta, árido paisaje, la arena dura
Una hiedra maléfica que se le encarna
Se ha armado un tribunal de inquisidores
Temerosos del sexo y el amor como la sarna
Porfirio, Bordaberri, Franco están sentados
Abusan de la mentira, son meros perseguidores.

Cuando los cuervos revolotean
Es que el portal de robles se ha cerrado
La tumba negra, el féretro abierto
La poesía los bárbaros han ultrajado
No perciben que de palabras va la cosa
Quieren matar a la gitana voluptuosa
Pero los muertos solo tienen el pasado.

No se es poeta por decreto
Pero los muertos de mediocridad
Sobrepasados por la vida, sibaritas de la nada
Se escandalizan por el verbo y la sexualidad
Sus ríos se han secado, el eunuco impelido
El aquelarre armado con la seca mano de María
No producen versos estrujando el diccionario
Ni rumiando saber en la ignorancia mitología
Confunden a Onetti, a Paz, anticuado cavernario
Les va de parabienes un torquemada redivivo
Para matar a los Juan Gelman en un viejo escenario.

Mientras en un brindis garabatea el poeta:
“Porque yo no escribía nada, pero cantaban
Los pájaros azules de la izquierda nueva
Y una lagrima un militante derramaba”

Y un buen hombre desde el cielo dice:
Perdónalos señor, no saben lo que hacen!

PERDER

Corrompe la carne
Como el cuervo dentro de tu entraña
Asi el fuego solitario que consume
Gota a gota la espera que te daña
Las ventanas de tus ojos opacadas
Tan solo unos rayos de luces que te bañan
La voluntad entregada a mejor postor
Con el alcohol que te aturde y acompaña.

Los espejos de la casa están cubiertos
El aroma a sexo seco quebrantado
Se esparce como el aroma de un velorio
Es el cúmulo de instantes rechazados
La intimidad de tu habitación en mil jolgorios
No por fiestas, llanto por quien no ha aceptado
Verse prisionero de tu voluntad incipiente
Perdiéndose en la bruma oscura del pasado.

No has vencido al tiempo
Tampoco te le has unido, sino te sometió
Te cobra duro cada trecho que recorres
De la risa el rictus, de las lagrimas fenecidas
Aquellos pocos años hoy suman aunque borres
Buscas entre las sabanas cada noche y no esta tu vida
Sabes que ya no vives, solo perduras
Al irse tus amantes de madrugada
Su nombre como conjuro murmuras
Con la esperanza día a dia apagada.

UNA NOCHE... EL AMOR!

Una noche negra de toda negrura
Una mirada atenta, lujuriosa
Ha golpeado a tu puerta mujer
Aquel quien te entrego la primera rosa
Detrás de esos golpes inocentes
Esta la fuerza de una mano que procura
Moverse, acercarte, virilmente reconocerte
A ti, que implorante buscaste su locura

Ahí están, los dos frente a frente
El te extiende un ramillete de pulcras flores
Tu al tomarla miras fijo en sus pupilas
Que te revelan todo el fuego, sus ardores
La noche se va apagando cansada
El ramo sucumbe arriba de una mesa
Han disfrutado de esta forma de la vida
Pero tú gimes, esperabas una promesa.
Esa que se ha volado hace un tiempo
La que pone en alerta tu sistema
Sin entender que el amor ha de llegar
Como la musa llega en su lapso al poema

INDIFERENCIA

Sobre un aire gris
Pesado y turbulento
Expiro un pájaro en su último canto
Su vuelo fue caer violento
Quien miro el último instante
De esta ave agonizante?
Tal vez los mismos ojos
En otros y tantos semblantes
Que el hambre, la muerte
No aparecen desafiantes
En el cristal empañado de estas vistas
Lo humano ha partido
Ya no ven en su ceguera de primates
Que no han ganado, todo lo han perdido.

Suenan ahora las campanas
Por sonar, por la costumbre
La mano del búho que la mece
Esta muerto en esa cumbre
De sonidos ataviados de negrura
Mira un dios la penúltima sepultura.

LA MIRADA DEL JUGLAR

Los ojos del poeta están cansados
Las manos, cinco dedos marchitados
El cuerpo proscribe su espíritu aventurero
Recuerda los pasos blancos por el prado
Los limoneros, de flores verdes aromando
Las galerías de la memoria de algún pasado
Oculto tras las pesadas sombras de su sombra
Con el alma desatada de prejuicios
Diestro que en un parnaso inverosímil
Viven desde el umbral la medianía y el desquicio.

No puede, sin traicionarse, arrojar la paleta de colores
Fabula cuestiones no admisibles, impensadas
Sabe que posee entre su ingenio, la locura
De un milagro superior, su punzante escritura
Acuerda que hay abyectos lugares sin retornos
De la felonía, la ramplonería, puñalada artera
Del insignificante que pretende atribuirse
Matando lo que despunta, de forma traicionera

Imagina en la vigilia, a la oscuridad mediocre
Con la soberbia de su hueca arrogancia
Que legislar sobre las tramas del creador
Se adjudica sin que se conmueva su prestancia
Con eso no comulgo, locas letras mías
Nunca ofrecí, dice el bardo, amor de fantasía
Incendie el celeste universo en un enero
Desiste intentar que alguien o muchos entiendan
Se atragantan con pasos nuevos de sendero
Lleva liviano el estigma, haz que aprenda:
El vulgar paga con odio que ese es su dinero

Los ojos del juglar se están abriendo….

Y Mi SENTIR...

Desde las ramas de un manzano seco,
En mi último sueño recordado,
Los crujientes pájaros de alas blancas
Pecho bravo y un cantar desafinado,
Saltaban en un estanque de aguas rancias
Por los troncos, las hojas acumuladas
Con las mentiras monacales como traba
Flotan flores para novias nunca desposadas

Desde esa pesadilla apenas recordada
Nostalgia vaga de algún beso desandado
De una promesa rota en una madrugada
De tus manos las caricias regateadas
Es el bagaje de recuerdos no evocados
Lo que rememoro es un presente constante
Navego remando a la sombra de un manzano
En este hoy perpetuo sin un mañana ni un antes.

Estoy goteando mi único descascarado ideario
Desde la pluma eximia de una florida gitana
Cuando la tinta o la fatiga humana
Suspenda su escrito, seré su presidiario
Donde no hay noches como tampoco días
Y mi sentir se habrá ido con la ultima poesía.