martes, 18 de marzo de 2014

DE DESEOS ...


Hoy
con uno de esos días a contramano
en los que me encierro en alguna plaza
veo pasar el cortejo de gente desconocida
tan a prisa,
sin alcanzar lo que creen que buscaban
objetos engañosos,
sujetos prescindibles
intento vano de ganarle a la parca
en un crepúsculo poco predecible.
Ahora
dentro de este tiempo efímero
he pensado en la locura
como un cielo ausente,
 sin nombre
como un suelo cubierto de nubes negras
como el vacío que siento cuando te vas
estirando mis dedos que acarician el vacío
ayer tan completo por tu estancia
ahora entiendo el proceso
por el que las sabanas se desquician
al quedar tan solo el aroma de tu desnudez
el hueco de tus senos en su tela
y los susurros desarmándose con rapidez.
Pronto
pensaré  en agonizar de abstracción
si no supiera de tu retorno
que espanta los soles de mis noches tristes
le ponen alegría a mi nostalgia
sueltas el portaligas como yo mi angustia
te quitas las prendas y yo la soledad
me besas hasta asfixiar mi silencio
te muestras esbelta orgullosa de tus filos
de tus tajos que abren el grifo de tus rías
del barullo vertiginoso de tu cadencia
se entonces que taladraremos los muros
estamparemos nuestros gritos y jadeos
porque este amor se afirma en esta esencia
siempre venceremos las tormentas
porque estamos hechos de afectos y deseos.
Roberto Brindisi


domingo, 16 de marzo de 2014

DECIRES


Cuando yo muera
¿quién me lo ira a decir?
y aunque lo escuche
no he de creerle
porque un muerto no fornica
no hace el amor
ni entabla batallas con la finitud
veré pasar a mis palabras anhelante
intentaré poder tocar
tu delantal de piel y bellos humedecidos
extenderé mis falanges hacia tus nalgas
pero habré fenecido
no sobre un féretro de madera
sino tan solo montando tu cuerpo
de hembra lujuriosa, invulnerable
y desde estas sombras te engañaré
lameré las aureolas de tus tetas
con una lengua que ya no habla
solo gime, jadeando hasta el cansancio
veras mi imagen sucia en el espejo
y no seré yo, tan solo mi reflejo
derramaré mi semen en forma de tinta
para que incubes alguna loca poesía
las velas que encendimos, el incienso
los pétalos de rosas regados en el lecho
son fantasmas de un amor que ha sido
esta ardorosa pasión no existe
el incendio que consume tus palabras
son frutos del espejismo de dementes
más despierto dentro de tu orgasmo
dándome cuenta de que todo existe
como nada también
que este amor no tiene sepultura
que esta tan vivo y tan caliente
que al desnudar lentamente este poema
solo quedan los huesos de una vieja armadura.


Roberto Brindisi

viernes, 14 de marzo de 2014

EL INTENTO DE ESCRIBIR


Antes de escribir
he sentido dolor y silencio
suavizados por la bondad
de garabatear mis soledades
apilar la garua de imágenes
sobre los renglones de tus pezones
en el margen de tu pubis traicionero
abro la boca para morder estas vocales
con sufrimiento o sin razones
solo las de un forastero
que asalta los labios de tu vagina
sintiendo correr una catarata ardiente
en esta astucia inconsciente recién abierta
de coleccionar palabras fracturadas
precipitándose desde el borde de tus labios
hasta escaldar la punta de mis dientes.
Estas estrofas iniciales
desfloradas entre gemidos de consonantes
despiertan en una mañana calurosa
interrogándose por su devenir
como desde la nada hice la proeza
para que el mutismo se multiplique
en signos que huelen a lujuria
con una terquedad analfabeta
narradora de encuentros clandestinos
de mujeres que labran con su oralidad
la idea enardecida de un sujeto salvaje
que se sumerge en la fontana
resplandeciente al final de la alborada
en tanto se rebelan ciertos sustantivos
temerosos de no ver la luz en este largo viaje.
Termino de escribir
sobre la delgada superficie
del cuaderno colorido de tu piel
siento la conmoción de deslizar la lapicera
recorro con el blanco de mis pupilas
las aguas arenosas por donde transitamos
las fracciones de mis huesos y mis delirios
mezclada con parte de tu cuerpo y de tu sangre
con el paso de este tiempo voluptuoso
presiento que volverán a unirse estos cirios
en una orgia absoluta de gritos acallados
mientras que el universo se rinde respetuoso.

Roberto Brindisi

DELIRIUMS


Durante la noche
es cuando sucede,
cuando dejar caer
dejar que rueden las lágrimas
tiritando de dolor
bajo las alcantarillas, cerca del agua
por donde navegan espectros iluminados
seres decapitados
horas escapadas del reloj
y mi espíritu en una hoguera
en una pira letal
mi corazón disuelto
en minúsculos astros negros
palpitando,
naufragando
hacia el atardecer del olvido
sabiendo que no hay abandono,
no hay indiferencia
más el esfuerzo de ser es muy grande
la voluntad de vestirse de uno mismo cada día
remontándose como una ciénaga
arrastrándose como un rígido cadáver
alforja compacta de gritos y maldiciones
cosa finita con puños apretados
amenazando al suelo y al cielo,
el sendero alcohólico del universo
percute en mi mente iluminada
como una galería de espanto
en la que alguien busca tener consuelo.
Moraré en otro espacio
contenido en algo más pequeño
sin nombre
sin lenguaje
no llamado
cuya única peculiaridad
consiste en mi silencio lujurioso
volveré de esta pesadilla
a respirar tu aire
a saberme vivo y entero
cabalgando en el lomo de una orquídea
saboreando tu desnudez incomparable
como sucede con el amor primero.

Roberto Brindisi  



jueves, 13 de marzo de 2014

LA ESPERA


Indescriptible es esta espera
esta tensión de todo el ser
este añejo habito de esperar
a quien creo que no ha de venir,
quizás de esto muera,
de este aguardo enmohecido,
de este polvo expectante
más cuando lleve un gran tiempo
en el que se me haya ido la vida
mis huesos estarán aun alzados
esperando,
mi osamenta será como perro fiel
en la triste cima del abandono,
mas cuando recién muera,
cuando inaugure mi muerte,
mi ser en súbita erección
estará petrificado
en forma de eterno demorado
en forma de incomprendido enamorado
reconociendo que lo que me mata
la arquitectura de mi enfermedad
el nombre de lo que me muerde
como un animal crecido bruscamente
en la alborada de mi garganta
surgido de mi llamado

es esa espera nacida de un amor urgente.

domingo, 9 de marzo de 2014

MOMENTOS Y MÁS


Cuando oigo
el lejano silbato de un tren
el sonido de un rio imaginario
el rodar de unas piedras chapoteando,
cuando miro las sombras que se forman
creando cambiantes figuras
como el humo que juega a la ronda
en mi nocturna ventana empañada
tiendo a pensar en este cuarto
en los espejos que colgué
agraciados por la suerte de retenerte
mirando desentumecerse a mi gata siamés
esa que es tan oriental y hábil
que hasta en sus ojos puedo verte desnuda
reflejadas tus formas en las pupilas felinas
sigues siendo trascendente
mas haya de aciertos o de dudas.
Cuando huelo las violetas
que embellecen con sus conveniencias
aun el rincón más desahuciado
en este límite de nuestra casa
donde es sitio habitado por fantasmas
que exhalan el aroma a tabaco viejo
hay millones de ojos que nos espían
excitándose con tus turbulencias taurinas
en la plenitud de tus bendecidos senos
pongo en remojo mi paladar
le saco filo a mis mejores besos
lavo mis delgados dedos en tus afluentes
en tanto sumo noches merecidas
esas que brillan desmemoriadas
recuerdos mezclados con las cosas más urgentes.
Cuando huelo tu perfume
de aroma delicado
ese que recubre la calidez de tu espesura
vale sentirse muy agradecido
dibujando en muros imaginarios
los borrones de mis muchos desatinos
es que encuentro las aristas de mi cordura
separando tus labios insurrectos
cerrando mis ojos a estos raros instantes
donde lo cotidiano asoma inusual
cayendo rendido sobre lo terso de tu piel
sin que represente ningún sacrificio
sino solo pensar en la recompensa
de no desertar del acuerdo de haberme sido fiel.


Roberto Brindisi

sábado, 8 de marzo de 2014

LLUVIA DE ESPERA


Ruido suave
el agua de la lluvia
que marca su presencia
en tanto voy sumando
la caída de las gotas
aplastada sobre mi mano
no me enamora su continuidad
sino la atención de mis ojos
en este aburrido día
en el que poco se me ocurre
más todo es un océano de inmensidad,
transcurrieron unos segundos
con mi pensamiento adormecido
ahora en el escaparate de mis neuronas
solo tus ojos domingueros
son mis acordes permitidos.
En esta tarde oscura
color de cemento aburrido
casi no hay niños en la calles
ni pájaros en los arboles
solo garúa que no termina de caer
sobre los pasillos perdidos
de este camino hacia tu cuerpo
silueta de carne dura
de formas atractivas y excitante
habrá de parar la tormenta
o atravesare los ríos de tu hermosura.
La lluvia ha de pasar
pero mis pensamientos por vos
por los poros de tu voluptuosidad,
eso difícil se retraiga
imposible se llamen a retirada
nunca mientras queden alboradas
que teñidas de penumbras
aclaren mi vista y mi tacto
será cuestión de esperar
de expandir al viento el relato
de colocar en versos mis deseos
de colocar los adjetivos sonrojantes
los que repican en el interior
entre los dedos de mi deseo
aguardando como esperan

el encuentro terminal de dos amantes.

LUNAS


Cuantas lunas
me llevo buscarte
tantas saber que lo hacia
muchas han de haber sido
que contarlas no podría
puedo adivinar mi intento
por mis pliegos y rupturas
esas de mis asperas heridas
la de la vasta soledad
donde se esparcio este silencio mio
entre los cantares de un amor
que despliega suave sin minguna atadura

martes, 4 de marzo de 2014

PREGUNTO


No, ni eso sé
lujuria magnifica de la ignorancia
encuentros entre lo que sucede
y lo que suelo soñar
hablo en genero neutro por no saber,
acarreo sustancias caóticas
venidas de todas mis memorias
como también de todos mis olvidos
escribo como cuando se habla en sueños,
silenciosamente
saber que algo me defrauda del descuido
apenas veo un blanco ausente
que escupe sangre para que recuerde a mi cuerpo
no hay culpables
aunque quisiera a alguien a quien acusar
para reclamar porque me hizo lleno de sed
porque puso en mi todos los deseos
y todos los anhelos
porque me dieron manos para acariciar las tuyas
porque apareció mi sexo
mas anhelante que mi propia lengua
porque fui obligado a ser deseo puro
si sabía que la desposesión es la llave de mi edén
si sabía que me apartaron de la dadiva
como si hubieran imaginado
que entre el pedir y el recibir
no hay ninguna continuidad posible
pero a quienes les hablo?
Y porque no sé dónde queda el final?
pregunto porque para ello fui hecho
aunque a la hora de morir me niego

ya que tu presencia es mi arma vital.

TARDES VERDES


Sobre el espejo
veo el espacio recortado,
algo me dice que soy yo
pero el silencio
la oscuridad de este cuarto
hacen que dude,
huelo el aroma a mujer en celo
impregnado en las lámparas apagadas
carne sabrosa que me empalaga
me he vuelto adicto a tus labios
los que besan majestuosos
los que bajan hasta detenerse
los que trabajan o juegan,
me he vuelto dependiente
de mirar la desnudez de la alborada
contando tus perfectos poros
secando con mi lengua tu sudor
y de entre las ropas desparramadas
sobre un suelo virgen de abundancia
veo derramarse la sombra de mi silueta
extenuada más conforme
acuso recibo de estar viviendo
de no ser producto de supersticiones
solo un astro en mi pequeño firmamento
un madero compuesto de astillas afiladas
de recuerdos que no terminan
de mañanas hechas de los colores
que abandonaste en el baúl de esta pieza
contrafilo de mi navaja acerada
la que tajea y troncha los versos
que mi humilde mano de alfarero
artesano que se regodea entre tus senos
a pura porfía de ponerle nombre a tus pezones
asi me hallo yo
carente de todas las palabras
dueño de todos los silencios
hasta que el gemido de hembra terminada
libera mi cerebro para que retornen los vocablos
ahora podré terminar aquellos versos
donde cuento que te conocí un domingo
haciendo el amor de forma incansable
fueron las tardes verdes de tus ojos
la que potenciaron mi costado más perverso

hoy te agradezco ser amado y amable. 

domingo, 2 de marzo de 2014

VENIR A…


Mi deber es
convertir la nada en casi todo,
hacer cobijo con retazos,
trocar el insulto en besos sabios,
sembrar con esquirlas de granadas
cosechando caricias lujuriosas
en el mismo lugar que asesinan
los sueños que nacen de utopías,
plantar el humo de metralla
para recoger amores de averías
parir cataratas de palabras
que derrumben miles de murallas.
Vine a este mundo
con la sagrada misión de ser amante,
muchas veces incomprendido,
otras tantas cayendo indiferente,
a salvar del ostracismo
a remilgadas mujeres civilizadas
recordarles el salvajismo de sus raíces
desalmidonar tantas camas recatadas
saber que del sexo y el amor
puede extraerse sangre vital en madrugada
permitiendo que sea el placer
quien sepulte las espinas del dolor.
Vine
a desandar los caminos extraviados
escribiendo los versos enloquecidos
a contar la demencia de un amor en primavera
a impulsar los huracanes en nuestros continentes
cuando pasa el sudor de varias alboradas
mientras en las cuencas vacías de un espejo
solo quedan lagrimas detrás de los gemidos
habrá que reescribir la historia
la de voluptuosidad como pecado
habrá que decir de mil maneras
que el gozo perdura en la memoria
mientras las damas y señores recatados
no sabrán más que de tanta hipocresía
vine por el sendero de unos ojos verdes

a escribir mis poemas exaltados.