martes, 6 de enero de 2009

TU ILUSION



Casi no hay lugar donde no corra agua
Y el agua tan solo se parece al agua
Como los fondeaderos se parecen entre si
Los puertos a orilla de ciudades y de mares
Son similares entre si y distintos a los lugares
Suelen estar rodeados de la magia de los bosques
Las dársenas desconocidas son míticas y brumosas
Encantadas protagonistas y testigos de leyendas.

A orillas del río de tonalidad de león
Antaño me consumí antes de renacer
Volví a la vida en las cosas que te evocan
En un atardecer con el sol ocultándose
En los primeros rayos de luz de una alborada
En las calurosas horas de varios mediodías.

Regrese de lo más profundo del averno
Adonde me llevo la condena del alcohol
Con la carga de los tristes sentimientos
Y la mochila con pesares confundidos
Volví como lo hace el que conoce el infierno
A deleitarse con las cosas de cada momento.

Volví a sonreír con cada pétalo de rosa
Que incinera en mí una pestaña nueva
A incendiar mis pupilas con las olas
En los mares que ígneos se renuevan.

Retorne para ver como el bravo mar
Fructífera en tu superficie desnuda
Como tu garbo lobezno impurifica
Zambullida en una masa de agua salutífera
En un gran océano imperfecto.

De igual manera
El polvo azulado de la extensión de la luna
Me habla de un amor fenecido y en espera
Que con las últimas luces del cuarto menguante
De una marejada de cenizas sílice
En un desierto de cráteres errantes
Solloza pidiendo mi regreso en silencio
Desde mí partida en un inesperado instante.

Ahora que he vuelto trato de abrazarla
Pero soy una ilusión que no puede consolarla…

1 comentario:

Eduardo Leira dijo...

--¡Si, hay un cambio! --graznó el docto Putrefacto.
Planeta de poesía, asistía asombrado al nacimiento de una nueva era...
--¡Y con tu brillo, intercambiarás la razón, primate! --exclamó el excecrable.
Sin embargo el Hombre, sonrió imperturbable, solo escribía, pensando en intangibles sonrisas, en emociones eternas, escribía en un sinfín de sonrisas, hechas poesía...