JUICIO FINAL

JUICIO FINAL

Un campanario que sonara destemplado
Sobre la desierta plaza del pueblo viejo
Sopla un fuerte viento en sentido equivocado
Ahí se acunan promesas de amor allá a lo lejos

Un sacristán echa de la iglesia a un desocupado
Protegiendo a una acaudalada oveja descarriada
Un niño mocoso mendiga pan en un costado
Su hermana ofrece flores frescas en un bodegón
Ante la sonrisa hipócrita de los comensales hastiados
Que sarcásticos se burlan de miseria y miserables

La inocente niñez desde el pulpito es declamada
Los medrosos incluidos de la sociedad “civilizada”
Ven espectros, fantasmas, en los habitantes del futuro
Brunos degradados intuyen su destino de extramuros
Con la marginación permanente como único horizonte
Con la intemperie, la exclusión, fieles compañeros
En contraste promiscuo de unos pocos embusteros
La creciente indigencia vivida como un despeñadero

Mañana la campana y el anciano alcalde callaran
Los almacenes y las fondas del poblado universal
Las fortalezas blindadas de los hartos temblaran
Ante los sublevados pobres, dioses de un juicio final.

El silbido dice que han sido los saciados
Que sembraron vientos, cosechando tempestades

Roberto- a mi compañera