lunes, 1 de diciembre de 2008

LA GOTA



Soy la gota
Aquella que estuvo en el génesis
Cuando El separo los cielos
La que surco el tiempo
Regando las flores de los suelos
La que paso del cuerpo de un amante
Al de otro también enardecido
La que rodó
Lenta
Suave
Caprichosamente
Desde la boca de una Eva
Hasta el mástil de una nave
Persistiendo alocada
En la pelvis que se lleva
La luz de la alborada.

Ahora soy
La que muto
Transformada en sufrimiento
De una madre
Que pide por sus hijos
Soy la gota de los llantos
De tanto desconsuelo
De tantas madres multiplicadas
De tantos hijos arrinconados
Hambreados, desaparecidos, asesinados
Soy la gota que ha variado
De ser una en océano desbordado.

Ya no soy
Todo se ha consumido
Quizás consumado
Asi debió ser
O fue por el azar
Me conjetura alguien
En su despertar de sabio, de erudito
Mira al cielo
Sus ojos no me recuerdan,
No me reflejan
Quede en el sueño
Quede tan lejos
Que siendo gota en la vigilia
De existir como salado mar
Soy prisionera eterna en los espejos
Hasta que el bardo vuelva a soñar.

1 comentario:

Unknown dijo...

Hola!!!
Me ha gustado especialmente esta poesía.
Tengo que agradecerte que pueda leerlas en mi correo. Es un detalle por tu parte.
Quería decirte que siempre las leo con gusto pero he conectado con ésta.
Gracias por compartirlas con tod@s nosotr@s.
Un abrazo y buen día.