lunes, 25 de agosto de 2014

LAS PESADILLAS Y LA PUTA


Desde el interior
Desde el borde
miro antes de ser arrastrado
intento sujetarme de algo solido
encontrando solo la desesperanza
la agobiante desdicha de la alborada
las ramas quebradizas del agobio
y una ráfaga me sumerge
hallándome paralizado sin movimiento
como en la peor pesadilla
donde las viudas arañan los muros
donde los poetas pierden las palabras
a ese infierno vendrán los espectros
a preguntar por lo más oscuro.
Me extraña
porque aún conservo mis ojos claros
no fueron salpicados por la sangre
todavía tengo la tinta entre mis manos
significa que puedo abrir las alas
remontar las noches más pesadas
largarme al mundo esperando todo
deseando hallar a mi mujer amada
desvestirlas con los flujos de mis anhelos
volcar mi piel hasta pulverizar sus poros
como puede el ser humano
pasar de la oscuridad a alzar todos los velos.
En un instante
desde la entrada misma
al camino de tus pies descalzos
recorreré jadeante entre la fragancia
en medio de la espuma de un mar de pétalos
viendo las marcas en el sendero de tus gotas
como aspiras el aire más embelesado
como corre por los renglones mi pluma de poeta
como se ciñe el universo en los espejos
hasta contraer tu figura de niña inocente en su diablura
la más deseante,
la más corrupta,
la que levanta el desnudo de su piel
para entregar pitonisa voluptuosa
una de las que suele ser más puta
en el instante de desplegarse afectuosa.
Roberto Brindisi





No hay comentarios: