viernes, 11 de diciembre de 2009

TIEMPO
















Hubo un tiempo
En que quise repintar el universo
Reformarlo de tal manera
Con tamaña magnitud
Que no seria el conocido
Sino una roja inmensa esfera

Hubo un tiempo
En que renegué de la forma de andar
Pretendí acelerar las agujas del reloj
Hacer de los campos un colosal océano
De minutos vertiginosamente apresurados
Quizás mojados, empapados
Por las abundantes lagrimas
De las mascaras sostenidas en mis manos

Hubo un tiempo
En que aguarde desesperanzado
Busque alcanzar la paz por medios belicoso
Desoyendo a cada anciano
A cada venerable y humilde residente
Creyendo que mi despiadada arrogancia
Alisaría el espacio sin resquicios
De momentos de tranquilidad carente.

Hoy es otro tiempo
Uno en el que todo mi mundo
Se concentra en la belleza de tus labios
Se extiende en cada sitio de tu dermis
Poblado por multitud de poros humedecidos
Llegando hasta el salitre de tu vientre
Derramándose por la soltura de tu cabellera
Recogiendo los frutos milagrosos bendecidos

Hoy es el unico tiempo
El que puede ser vivido
El que debe ser aprovechado
El que hace sobrevolar sus pájaros
En el terreno pueril de tu inocencia
En la mañana de trinos inventados
Con un balbuceo que indica tú presencia
En el terreno escabroso de mi ternura
Invitada por la sumatoria de mis deseos
A desplegar las bondades de tu esencia.

Ahora es el preciso instante
En el que nos fugamos del tiempo y del espacio
En el que la mirada es una sola
La que apura para madurar acompañándonos
En la antesala del penúltimo escalón
Alli donde se vive y nadie por pasión se inmola.

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