martes, 15 de junio de 2010

EL ESPEJO Y LA COBARDIA

El espejo es testigo




Cómplice mudo de tus noches



Mariposa capturada en pleno vuelo



Cuando aun el filo del alba no ha llegado



Así, deshojas los fríos de este otoño



Sentada en el borde de la cama



Deshilvanas las tardes perdidas



En los portales iniciales de algún drama



Ahora todo es un inmenso silencio



En el que no cabe más soledad



Son tantos los colibríes asustados



Que quedan postergados en el camino



Los sueños incumplidos del pasado





Tu imaginación está cargada de siluetas



Finas algunas, groseramente grande otras



Apareciendo y desapareciendo



Tantas veces como abres las pupilas del alma



Allí donde conservas los momentos



De éxtasis apasionado



De amantes con promesas inigualables



De decisiones abandonadas en el sendero



Hacia una plenitud imaginada



Confundida aun



Ante la poca importancia del final



Y la grandeza inimitable del intento



Salir del pantano paralizador



De utopías garantizadas por algún filibustero



Perdiendo cada oportunidad que te sonó sincera





Ahora, en este atardecer terracota



Solo cabe lamentarse por lo no vivido



Nada de lo que pudo ser esta en algún tiempo



Solo es imagen retenida de su sombra



O es la sombra de lo que nunca ha sido



Por esos las lastimaduras del espejo



Porque lo recorren los miedos de quien nunca ha decidido

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