martes, 22 de junio de 2010

EL TIEMPO, EL AMOR Y EL SEXO



El tiempo
Tantas veces gastado, tantas recuperados
Por míseros poetas o entrañables juglares
El tiempo se diluye o se proyecta
Pero tiene un solo instante real
El de el ahora
Lo demás es magnolia perdida en el aire
Los segundos son gastados.
Perdidos o inexistentes
Como el agua que se escurre entre falanges
De dedos perforados
De manos amorosas tan ajadas
El tiempo dobla
En la misma esquina
Que los duendes del pasado
Donde inevitablemente borraran sus pisadas
Y quien lo recupera?
Para que?
Si el tiempo pretérito es tiempo muerto
Solo te araña desde el deseo inconciente
De que perdure aferrado
Pero nada cambia para bien
Solo es daño colateral
Como las bombas de una guerra
La propia
La de uno contra si mismo

Asi llegas con los instantes
Mujer provocadora
Evaporada y renacida
Desnuda y redefinida en mi mirada
Cuando las balas del ayer ya no te alcanzan
Cuando las calas y orquídeas del presente
Te pertenecen por entero
Ganadora de mil batallas
Escondedora de las pérdidas
Mas ¿para que juntar sus retazos
Sino habrá camino de regreso
Solo abrir espacios en el las colinas
Del momento que el encuentro sea inevitable?

Asi y solo de esta forma
Puedo concebir cada lapso que surca el espacio
Suma inmaterial de vocales
Multiplicación irremediable de consonantes
Dadora de lágrimas santificadas
Que en las noches juras madrugadas
Que en la sensualidad entregas luces voluptuosas
Ardientes, calientes, sudorosas
Que rasgan en sinfonías otoñales
Las luces de la apertura, compendio de las verdaderas cosas. 

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