miércoles, 5 de octubre de 2011

AMIGA

Te escucho


Como amigo tuyo

Que algo entiende del amor,

Porque se que has amado,

Como muchos pensamos

Que no se ha de volver a amar,

Al menos en este instante,

Cuando evocas las noches soberbias

Y esas promesas de eternidad.

Hoy te suenan a broma,

A ironía,

A un mero engaño

O simplemente

Creer para no morir,

Para evitar la soledad.

Y ahora

En la lucha con las sombras,

Con las alboradas difusas,

Con las superficies confusas,

Donde has dado todo,

Hasta lo que los años no te quitaron,

Lo que no tenias,

Peor,

Lo que ya no tienes,

Lloras unas lagrimas de dolor.

Amiga,

La mesa del café

Nos esta quedando chica,

El ruido de las tazas y las copas

Apagan tu confesión pedida

A un ateo,

O quizás creas en serio que soy un dios,

Quizás borgeano,

Más te digo,

No me devoré los monstruos

Que aun me acechan desde temprano.

Amiga mía,

Hermana de esta cofradía,

Ahora languidece tu vida,

Se fue con ese talante

Que ya no encuentras,

Lamentablemente

Que no recuerdas,

Pero creo que si decides

No podrá contigo la nostalgia,

Es tarde para andar otra vez

Acometida por una apariencia muda,

Ya no mas los amores místicos

Con caras clavadas en tu centro,

Ante el amor no vaciles ni tengas dudas.

Amiga mía,

La vida solo tiene sentido

Cuando amas

Como ahora no quieres hacerlo,

Este viejo lobo estepario

Como no habría de saberlo,

Porque yo también intente

Un rostro y un nombre

Que colorearan mi desierto,

Que me permitieran seguir buscando

Aun sin encontrar,

Que me habilitaran lo que de otra forma

Es la crueldad del hastío,

Tiempo en que nada acontece,

Solo la soledad y el frío.

Amiga, sabes?

Que dos pasos antes de mi tumba

Se ha cumplido,

Hoy tengo amor,

Después de tanto recorrido.

Tú y yo

Amiga mía,

Somos lo mismo,

Una vieja pena de desamor,

Con la alegría

De empezar en un domingo

El inocente juego del rubor.

No hay comentarios: